martes, 29 de julio de 2008

Jean-Jacques Rousseau o la pedagogía de la vocación


Después de algunas revisiones acerca de cómo el lector debe percibir los escritos de Rousseau como el caso de verlo como un pedagogo auténtico creador de técnicas cuando el solo es un filósofo buscador de principios o que solo los primeros libros del Emilio tratan de pedagogía, nos encaminamos a lo que la lectura refiere, la pedagogía de la vocación.

Pero, ¿a que se refiere Rousseau con vocación humana?, la vocación humana está referida con el hombre de la naturaleza, aquel que posee razón y sabiduría, es necesario esta vocación humana puesto que los hombres son hombres de hombres, hipócritas, destructores, y mentirosos, aquí habría la coyuntura del tiempo en que se vivía, a Rousseau le toco vivir épocas donde las sociedades poco a poco iban cediendo ante la corrupción, para mal momento el hombre era un ser sociable por naturaleza y hasta a veces se prefería la soledad, pero frente a todo ello, Rousseau mostró en el Emilio una alternativa de solución.

Rousseau era de los hombres que respetaba mucho la naturaleza (en un sentido amplio de la palabra) para él, si se seguía el camino de la naturaleza llegaría a formarse una sociedad sin corrupción, el problema eran los hombres, inconformes con lo que la naturaleza hizo, solo manipulan, transforman, destruyen. Creo yo que al hombre se le hace muy difícil dejar de lado sus errores y corrupciones, es un ser que siembre va a tender al error, solo es la intensidad y el aprendizaje lo que hace que esto sea útil.

Sin embargo Rousseau pensaba diferente, el todavía confiaba en un tipo de gobierno y en una forma de educar, esa forma de gobierno que pudiera expresar en el contrato social y que está resumida en el libro V del Emilio, aquí se habla de una educación pública, la que cubre el estado y que a tenido algunos buenos resultados el otros países, pero no resistiría un País como el de Rousseau en su tiempo y el lo sabía, por eso profundizó un poco más el problema social que involucraba directamente a los hombres, algo que nos acerca un poco a su pedagogía de la vocación.

El presente autor de la lectura(Château) me hace notar la importancia de una de sus obras, que es la que compila sus pensamiento en si, sin duda la obra de la que hablo es el Emilio y creo enfatizar al igual que el autor en sus últimos libros que son lo que reflejan la inclusión del hombre a la sociedad, el contrato y profesión de fe. Pero,¿ porqué la importancia de estos puntos?.

En el Emilio tenemos la evolución del hombre animal al hombre racional, este se da a través de un proceso en el cual va desde el infante hasta el hombre formado.
El infante debe ser educado en los primeros años, sin libros, ni perturbaciones, ni cosas por el estilo, es el tiempo de la nada, solo cuidados básicos.

El niño tiene que empezar una preparación para cuando sea púber, pero sin nada de conocimientos, solo tiende a desarrollar su naturaleza física, desde este punto hasta que cumpla 15 años (edad mostrada en el Emilio) la cual pasa ya a otra etapa llamada educación moral. Hasta aquí todos estos procesos son parte de lo que llamaría Château pedagogía funcional usado por otros pero con algo que hace original a Rousseau, es una pedagogía de la vocación, (los niños tienen vocaciones distintas a los adolescentes) donde en cada etapa tiene características propias pero que con el proceso que se lleva conduciría al mejoramiento de la sociedad.

Al llegar a la educación moral puedo observar lo importante que es para Rousseau la moral, tanto que se tiene que esperar que se posea razón para aprenderla, hasta pensar tiene su proceso; según Château puedo entender que Rousseau pensaba que el pensamiento se generaba a una edad determinada por las sensaciones, después al combinarse se gestaba una razón sensorial, ideas, y por acción de las ideas se producía la razón intelectual, la cual era considerada como razón verdadera humana, recordemos que el trabajo de la educación era ser personas racionales capaces de controlar la ciencia y de ser libres.

Para Rousseau el hombre verdaderamente libre no quiere más de lo que puede, por lo que puede hacer lo que quiera, en tal sentido, este hombre no haría daño puesto que no fue corrompido, algo a lo que él quería lograr, para esto tampoco olvida el papel de la familia que la que se encarga junto con el preceptor de la preparación, este último es el que se encarga de crear algunas condiciones para que se den los aprendizajes.

Volviendo a la moral, señalaré que es integral y racional, me recuerda al pensamiento socrático. Aquí el adolescente tiene que demostrar que es un hombre que piensa y actúa, que posee razón e inteligencia, esto es unos tres años hasta los 18, después ya viene el final de todo la inserción a la sociedad. Capas de crear condiciones en una familia, el hombre ya formado puede esta listo para socializarse, es capas de manejar la ciencia, sus impulsos, las artes, y sobre todo ser un ciudadano.

Como hemos visto, Château describe muy bien en la lectura el proceso de formación del ser humano como medida de lucha contra la sociedad corrupta de su tiempo; en nuestra sociedad, donde la corrupción a avanzado incansablemente, donde el sistema político es heredero de injusticia, donde quedó el contrato social a medias, y donde la educación se a polarizado, todavía algunos núcleos familiares quedan sin contaminar. Pero aún así no creo que fuera lo que Rousseau quiso para todos, o al menos ya no se ven personas como el, capas de tener un plan, capas de ser auténtico siempre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Revisa la ortografía...