Lo real ante todo

Cuando estuve en la academia, antes de ingresar a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, parecía segado por el sueño y prestigio que tendría al ingresar, cuando lo conseguí me sentí muy entusiasmado con lo logrado, sabía que no era fácil ingresar y que estaba allí porque tenía algo de conocimientos, era (según mi perspectiva) la mejor universidad del Perú, pensé pues que todo el esfuerzo sirvió de algo, pero lo que no me di cuenta era que tal perspectiva que tenía de mi casa de estudios era errónea.
Paradójicamente de San Marcos habían salido aquellos hombres que habían construido la historia del Perú, digo paradójicamente porque de esos hombres solo quedaban sus discípulos y el recuerdo de aquellos y los que se encontraban ahora no tenían ni las más remota idea de donde estaban, me sentí decepcionado, que era San Marcos entonces, era solo un gigante gastado por lo años, un dinosaurio poderoso que está enfermo, enfermo de un mal con fuerzas persuasivas destructivas cuyas células (los que la integramos) se encuentran inactivas por el bloqueo de la realidad. La triste realidad del orgullo Sanmarquino es que nos enorgullecemos del pasado mientras que el presente nos está ahogando, algo así como escribía Don Manuel González Prada en su tonel de Diógenes, referido en uno de sus capítulos a los españoles, cuando ellos se llenaban de orgullo de cosas pasadas mientras que el presente los estaba desechando. Es cierto en parte lo que dijo Tratemberg, y sus palabras deben de servir, más que ofensas, de reflexión a todos los Sanmarquinos, porque la realidad es muy distinta a la que todas las semanas vemos en San Marcos al día, lo real es la crisis y lo concreto es trabajar para solucionarla, no basta análisis FODA, ahora faltan respuestas, espero alguna ves que los hombres que significaron mucho para el Perú, puedan salir de nuevo de San Marcos, porque se que San Marcos es fuerte, así como lo somos cada uno de nosotros, le debo mucho a esta universidad y no pienso dejarla caer es comentarios mediocres espero no estar solo.